Los planetas del Sistema Solar son ocho. Aparte de la Tierra, sus nombres corresponden a dioses de la mitología romana: Mercurio, el dios del comercio; Venus, la diosa del amor; Marte, el dios de la guerra; Júpiter, el dios supremo, creador del universo; Saturno, el padre de Júpiter; Urano, el dios del cielo; y Neptuno, el dios del mar. Antes de que se inventaran los telescopios, sólo se podían ver, a simple vista, los cinco planetas más cercanos a la Tierra. En cambio, Urano y Neptuno pudieron ser observados por medio de telescopios.
Los planetas tienen tamaños muy diferentes. El más grande es Júpiter y el más pequeño Mercurio, que además es el más cercano al Sol. El más alejado es Neptuno.
Los cuatro planetas más cercanos al Sol de llaman planetas interiores. También se conocen como planetas terrestres, porque tienen una estructura similar a la de la Tierra: sus superficies están compuestas de rocas solidas.
La Tierra se diferencia de los otros planetas porque en ella se ha desarrollado la vida, gracias a las condiciones de su atmósfera y a que contiene grandes cantidades de agua líquida.
En Mercurio, la atmósfera es muy tenue y liviana. Su superficie es rocosa, de color grisáceo y está cubierta de cráteres. En su interior, su contenido de hierro es más alto que en cualquier otro planeta.
En Venus, la atmósfera tiene nubes amarillas y está constituida sobre todo por dióxido de carbono, un gas nocivo para la vida. El interior del planeta es similar al de la Tierra.
Marte también es llamado planeta rojo por el color rojizo que presenta cuando se lo ve desde la Tierra. Su atmósfera contiene dióxido de carbono, nitrógeno y otros gases y la misma es tenue.
Los cuatro planetas más alejados del Sol se llaman exteriores o gigantes, por sus grandes tamaños. A diferencia de los planetas interiores sus superficies no son rocosas. Júpiter y Saturno se llaman gigantes gaseosos: están constituidos por gases, principalmente, helio e hidrógeno.
Urano y Neptuno son los gigantes helados: tienen hielo además de gases. También cuentan con anillos planetarios formados por partículas que giran a su alrededor. Desde la Tierra, sólo son visibles los anillos de Saturno.
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